La palabra «Acrópolis» significa ciudad en el borde, y hay muchas acrópolis en toda Grecia. Las acrópolis se solían ubicar en un lugar alto, y fueron utilizadas a menudo como un lugar de refugio y defensa contra el enemigo. La Acrópolis de Atenas es la más conocida de todas ellas, y por lo tanto se la conoce como «La Acrópolis», la «Roca Sagrada» de Atenas.
Situada sobre la capital griega, la Acrópolis es un conjunto de monumentos impresionantes que transmiten al visitante una inmensa sensación de grandeza y poder, y nos traslada a la antigua civilización griega.
Según la mitología griega, el fundador de Atenas y de las civilizaciones griegas fue el rey Cécrope. Él había nacido de la tierra y era medio hombre medio serpiente. Dicho rey enseñó a la gente diversos tipos de artesanía, así como costumbres funerarias, y fue el encargado de decidir qué Dios protegería la ciudad. Los dos candidatos eran la diosa Atenea y el dios Poseidón. Con el fin de demostrar su valía cada uno de ellos presentó un regalo para la ciudad.
Poseidón golpeó su tridente en la roca de la Acrópolis, y creó un pozo. La gente corrió al pozo para beber, pero el agua era salada, ya que Poseidón era el dios del mar. Entonces Atenea tocó el suelo, y surgió un olivo. El olivo resultó ser un regalo mucho más útil, por lo que Cécrope decidió que Atenea sería la patrona de la ciudad. La estatua de madera de Atenea, que originalmente estaba en la Acrópolis, se creía que había caído del cielo.
Historia de la Acrópolis de Atenas
Se cree que la Acrópolis de Atenas ha sido habitada desde el séptimo milenio antes de Cristo. Durante la civilización micénica, fueron construidas sus paredes alrededor de lo que era un palacio micénico también. Se encontraba allí también la tumba de Cécrope, donde los atenienses tuvieron una serpiente para simbolizar a su primer rey. Existían además otras tumbas y templos, todos relacionados con reyes, dioses y héroes influyeron a la ciudad.
En el siglo VI a.C. la Acrópolis cambió notablemente. Ya no era un lugar para los palacios, y se convirtió en un santuario. Cada año tenía lugar una gran procesión, donde vestían a la estatua de madera de Atenea y le ofrecían sacrificios. Los juegos Panateneas fueron muy importantes. En estos juegos se practicaba el atletismo y las competiciones musicales, y el ganador recibía un ánfora llena de aceite de oliva.
Durante las guerras persas del siglo V, los atenienses comenzaron a construir el Partenón, pero los persas quemaron la Acrópolis y los ciudadanos se centraron en la batalla. Fue durante la era de Perícles, la llamada Edad de Oro, cuando la Acrópolis adquirió la estructura que vemos hoy en día. A mediados del siglo V, se construyeron el Partenón, el Propileo y la gran estatua de bronce de Atenea. Se dice que Perícles utilizó a los desempleados de Atenas para trabajar, y gracias a esa iniciativa, todos los atenienses tenían comida en sus mesas. El Partenón fue hecho por los arquitectos Ictino y Calícrates, y la estatua por Fidias. A finales del siglo V, se construyeron el Erecteion y el templo de Atenea Nike.
Cuando los romanos conquistaron Grecia en el siglo II a.C., muchos de los santuarios fueron saqueados. Estatuas y demás piezas de arte fueron llevadas a Roma, desde sitios como Olimpia y Delfos por ejemplo, mientras que la Acrópolis más bien permaneció intacta. En el siglo II d.C., Herodes Atticus mandó construir su teatro que permanece hasta nuestros días y donde siguen teniendo lugar obras y conciertos.
Durante la Edad Media, muchos de los templos de la Acrópolis se convirtieron en iglesias cristianas. El Partenón, que había sido el templo de la diosa Atenea, pasó a ser una iglesia dedicada a la virgen María.
Cuando los turcos llegaron a finales del siglo XVI, convirtieron el Partenón en una mezquita. Hasta el siglo XVII, el templo apenas sufrió daños, pero en 1687, los venecianos bombardearon la Acrópolis y un proyectil golpeó el Partenón, que fue usado entonces como almacén de pólvora. El templo explotó y esa es la razón de por qué el Partenón no tiene techo actualmente.
A principios del siglo XIX, el inglés Lord Elgin, se llevó varios objetos de la Acrópolis, con el consentimiento del sultán. Se llevó los famosos mármoles del Partenón, que siguen siendo objeto de controversia ya que se encuentran en el British Museum a pesar de las peticiones de Grecia para que sean devueltos.
A pesar de todo, el peor enemigo de la Acrópolis de Atenas es la contaminación que existe en la ciudad.
Los Templos de la Acrópolis
La Acrópolis es el conjunto monumental más importante del patrimonio cultural de Atenas, convirtiéndose en una de las visitas más populares e impactantes de nuestro viaje por Grecia.
Para disfrutar al máximo de los tesoros de la Acrópolis, es aconsejable tener un mapa o marcarnos una ruta por este monumento ancestral. A continuación, describiremos los puntos más importantes de la Acrópolis de Atenas:
El Partenón
El Partenón, dedicado a Atenea Partenos, la patrona de la ciudad, es la magnífica creación de la democracia ateniense, equiparable a su poder en la época clásica. Además, es también el mejor monumento de la Acrópolis tanto en concepción como en ejecución. Construido entre 447 y 438 a.C, como parte del gran proyecto de Pericles, para reemplazar el templo destruido en 480 a.C por los persas.
El Partenón fue diseñado por los arquitectos Ictinos y Callícrates, mientras que el escultor Fídias supervisó todo el programa de construcción y concibió la decoración escultórica del templo y la estatua criselefantina de Atenea.
El Partenón es un doble templo dórico períptero con varias características arquitectónicas únicas e innovadoras. El templo está dividido en pronaos, cella y opistodomo, con una habitación separada en el extremo oeste, y está rodeado por un pteron con ocho columnas en cada uno de los lados cortos y diecisiete columnas en los largos.
El interior muestra un enfoque innovador que combina elementos nuevos y antiguos: el interior de la cella una columnata doble que sirven de fondo para la estatua de oro y marfil de Atenea Partenos, que mostraba a la diosa con armadura completa llevando a Nike (Victoria) a los atenienses en su mano derecha. La sala del oeste, donde se guardaban los tesoros de la ciudad, tiene cuatro columnas jónicas.
El Partenón se mantuvo sin cambios hasta el siglo V de nuestra era, cuando se convirtió en una iglesia dedicada primero a Santa Sofía y más tarde a la Panagia (Virgen María). Bajo el dominio turco se convirtió en una mezquita. En 1687, durante el asedio de la Acrópolis por Morozini, el Partenón fue bombardeado y destruido en gran parte. Otros graves daños adicionales tuvieron lugar a principios del siglo XIX por Lord Elgin, que saqueó gran parte de la decoración escultórica del templo y lo vendió al Museo Británico. La conservación y restauración del Partenón se llevó a cabo en 1896-1900 y nuevamente en 1922-1933.
El Erecteión
Situado en la zona norte de la Roca Sagrada de la Acrópolis, este elegante edificio fue construido en el 421-406 a.C, para reemplazar el antiguo templo dedicado a Atenea Folias. El nombre de Erecteión deriva de Erecteo, el mítico y adorado rey de Atenas.
El Erecteión debe su inusual forma a la irregularidad del terreno – hay 3 metros de de altura de diferencia entre la parte este y oeste- y a la diversidad de cultos que albergaba. La parte este estaba dedicada a Atenea Folias, mientras que la zona oeste servía de culto a Poseidón-Erecteo y albergaba los altares de Hefaistos y Voutos, hermano de Erecteo. Aquí es donde, según el mito, vivió la serpiente sagrada de Atenea. El santuario contiene también la tumba de Kékrops y las huellas de la disputa entre Atenea y Poseidón por la posesión de la ciudad de Atenas.
El templo era de mármol pentélico, el friso de piedra gris de Eleusis con figuras en relieve blancas y cimientos de piedra de El Pireo. En su lado este, un pórtico con seis columnas jónicas protegía la entrada a la parte este del edificio. Dentro estaba la estatua de culto de Atenea, hecha de madera de olivo, que se cubría con el peplo sagrado en el festival de las Panateneas.
En el lado norte se encuentra la entrada a la parte oeste del edificio, protegida por un propileo con cuatro columnas jónicas a lo largo de la fachada y una a cada lado. La piedra de pavimentación de este propileo fue pensada para preservar las huellas hechas por el tridente de Poseidón cuando golpeó el suelo y el surgió agua salada. Bajo el suelo del templo se encontraba, según la tradición, el Mar Erecteo, donde se reunían las aguas de la fuente de Poseidón. Una pequeña puerta en el lado oeste llevaba al santuario de Pandrosos, que se sitúa al oeste del Erecteion.
Cuatro columnas jónicas, con barandas de metal entre ellas, adornaban la fachada oeste. Por último, otra puerta en la fachada sur del templo occidental daba al porche de las Cariátides, una estructura en forma de pi con seis estatuas de mujeres en lugar de columnas para sostener el techo. Creadas por Alcamemes o Kallimachos, las estatuas recibieron el nombre de Cariátides en honor de las mujeres jóvenes de Caria (Laconia), que bailaban para la diosa Artemisa. Cinco de estas estatuas están en el Museo de la Acrópolis y otra en el Museo Británico.
El templo se quemó en el siglo I aC y fue reparado posteriormente con alteraciones menores. En la época paleocristiana se convirtió en una iglesia dedicada a la Theometor (Madre de Dios). Se convirtió en palacio bajo el dominio franco y la residencia del harén del comandante turco de la época otomana. En el siglo XIX, Lord Elgin se llevó una de las Cariátides y una columna.
Durante la Guerra de Independencia griega el edificio fue bombardeado y dañado severamente. La restauración se llevó a cabo inmediatamente después del final de la guerra y de nuevo en 1979-1987, cuando el Erecteion se convirtió en el primer monumento de la Acrópolis en ser restaurado como parte de la conservación de los restos históricos. Su restauración ha recibido el premio Europa Nostra.
Visitando la Acropolis
La visita a la Acrópolis de Atenas se puede hacer perfectamente a pie. Simplemente debemos tomar ciertas precauciones para que nuestro recorrido sea lo más agradable posible.
La primera cosa a tener en cuenta es el calzado, ya que el terreno es pedregoso en algunos puntos y podemos pasar varias horas de pie. Recomendamos también utilizar sombrero, gafas de sol, protección solar y llevar agua, ya que el sol y el calor suelen ser bastante intentos en ciertas épocas del año.
La Acrópolis de Atenas, la gran roca sagrada, situada en el corazón de la ciudad, nos ofrece una ruta por su interior inolvidable y, actualmente, totalmente accesible para personas con problemas de movilidad gracias a un ascensor instalado en la parte norte de la entrada principal.
Dicha entrada, conocida como Propileos, es la puerta monumental que nos conduce a los distintos tesoros de la Acrópolis. En esta misma entrada, situado a la derecha tenemos el Templo de Atenea Nike, terminado entre los años 427 y 424 a. C, después de las guerras del Peloponeso. Actualmente, este templo está totalmente restaurado.
Paseando por la Acrópolis, podemos disfrutar del Erecteion, uno de los edificios más elegantes de la Acrópolis. El templo fue construido desde 421 hasta 414, y desde 409 hasta 406 a. C en el lugar donde, según cuenta la leyenda, pelearon Atenea y Poseidón por el nombre de la ciudad.
Seguidamente, observamos el Partenón, dedicado de nuevo a la diosa Atenea. protectora del pueblo. Su construcción comenzó en el 447 a. C y fue completada en 438 a.C, aunque su decoración continuó hasta el 432 a.C. El Partenón es un gran símbolo de la democracia ateniense, y uno de los monumentos más importantes del mundo.
Otros de los puntos importantes en nuestra ruta por la Acrópolis son el Odeón de Herodes Ático y el Teatro de Dioniso. El cónsul romano Herodes Ático construyó este auditorio en 161, dedicado a su mujer difunta. El Teatro de Dioniso, ubicado en las faldas de la Acrópolis, fue el teatro más importante de la antigua Grecia, dedicado al dios del vino y del teatro. Fue levantado en el siglo VI a.C, fiel testigo del nacimiento del teatro clásico.
Visitar la Acrópolis de Atenas es toda una aventura. Podemos pasear por sus ancestrales rutas y disfrutar de un interesante viaje a la antigua Grecia. Una de las actividades recomendadas es visitar la Acrópolis acompañados de un guía o en su defecto, una audio-guía que nos introducirá cada uno de los monumentos que forman la Roca Sagrada.
La visita a la Acrópolis es apta para todos los públicos. Se trata de una excelente actividad educativa para que los más jóvenes conozcan las claves de la civilización occidental, desde sus orígenes en la antigua Atenas hasta nuestros días.
Otra actividad recomendada para todos los que se acercan a la Acrópolis, es visitar su nuevo museo, que abrió sus puertas en 2099 y que muestra las piezas más valiosas de este gran conjunto monumental. En él encontraremos los mármoles del Partenón, que fueron vendidos en 1800 al British Museum. El museo alberga más de 4.000 objetos, incluidas cinco de las seis cariátides originales devueltas por Reino Unido, y la impresionante Galería del Partenón, con su friso todavía incompleto ya que Reino unido no ha devuelto todavía las metopas ni la sexta cariátide.
La entrada a la Acrópolis tiene un precio de 12 €, y con ella podemos ver la Antigua Ágora, El Teatro Dionisos, la Ágora Romana, Kerameikos, el Templo de Zeus Olímpico, y la Biblioteca de Adriano. Para visitar estos monumentos dentro de la Acrópolis, existen varias rutas que nos permiten disfrutar de la grandeza del lugar en uno o varios días. EL precio de la entrada reducida es de 6 € y los niños entran gratis.
La Acrópolis de Atenas tiene a sus espaldas siglos de tradición. En ella tuvieron lugar importantes acontecimientos según la mitología griega (como la disputa entre Poseidón y Atenea por el nombre de la ciudad), y ha sido lugar de culto religioso.
La Acrópolis también ha sido escenario de importantes hechos históricos que han derivado en populares fiestas y tradiciones, como es el caso de las historias que giras en torno a la bandera de la Acrópolis.
En el lado este de la Roca Sagrada, podemos ver una bandera griega. Cuando durante la Segunda Guerra Mundial los alemanes ocuparon Atenas, ordenaron retirar la bandera a Konstantinos Koudikis, el Evzone (guardia presidencial) que la custodiaba. El Evzone obedeció, y muy tranquilamente bajó la bandera de su mástil, se envolvió en ella y saltó desde la Acrópolis, muriendo al instante.
Apostolis Santas y Manolis Glezos eran dos chicos griegos de 18 años conocidos como los Europeos. En la noche del 30 de Mayo de 1941, rompieron la bandera Nazi que se alzaba sobre la Acrópolis. Este hecho inspiró a los griegos y surgió un movimiento en toda Grecia en contra de la opresión Nazi. La placa al pie de la bandera conmemora el valiente acto de Santas y Glezos. Este último se convirtió en miembro de la resistencia. Fue condenado a muerte por traición en 1948 y fue encarcelado por ser comunista. Más tarde, Glezos fue miembro del PASOK, el partido socialista.
Cada día a las 6:30 de la mañana, un destacamento de la infantería griega iza la bandera de la Acrópolis. Cuando se pone el sol, otro destacamento baja la bandera. Los domingos, esta tradición la llevan a cabo los Evzones.
La Acrópolis de Atenas es uno de los destinos turísticos más importantes del mundo, y por lo tanto, uno de los más visitados. En los alrededores de la Acrópolis y las calles contiguas, encontramos varios puntos de información turística, así como oficinas la Organización Nacional de Turismo Griego (GNTO).
Museo de la Acrópolis de Atenas
De visita imprescindible, la construcción del museo con vistas a la Acrópolis ha permitido reunir una gran parte de los restos hallados en las excavaciones arqueológicas.
Dentro del Museo de la Acrópolis, tenemos unos de estos puntos de información turística:
E-mail: info@atedco.gr
Tel. +30 (0) 210 331 0392
En el centro de Atenas, tenemos otra oficina de turismo:
Dirección: Amalias 26, Atenas
Grecia
E-mail: info_desk@gnto.gr
Tel. +30 (0) 210 331 0392
Horario: De lunes a viernes de 9 – 19h, y fines de semana de 10 – 15h
Tours y excursiones a la Acrópolis
Hay bastantes opciones de visitas en español a la Acrópolis de Atenas, acompañados de guías acreditados
Como llegar a la Acrópolis
La primera cosa que debemos hacer para visitar la Acrópolis es llegar a Atenas mediante los diferentes transportes como en avión, en barco o por carretera.
La Acrópolis está situada en el medio de la ciudad y es muy difícil no toparnos con ella. La mejor manera de llegar hasta ella es quizá caminando desde Syntagma, Plaka o Monastiraki. Desde Monastiraki, al final de la calle Adrianou, podemos caminar por la Acrópolis a través del Ágora o subiendo las escaleras de la calle Dioskouron.
La manera más fácil de llegar a la Acrópolis es usando el metro hasta la estación de la Acrópolis. En la salida hacia Dionysiou Aeropagitou está situada la entrada al nuevo museo de la Acrópolis, y a 3 minutos de la entrada principal a la Acrópolis, justo al lado del Teatro Herodes Atticus.
Dónde comer
No podemos perdernos la experiencia de saborear la mejor gastronomía de Atenas, mientras disfrutamos de una vistas únicas a la Acrópolis.
Alrededor de la Acrópolis, se encuentran varios restaurantes griegos, tabernas, bares y restaurantes de comida rápida, para que en nuestra visita a la «Roca Sagrada», podamos descansar y reponer fuerzas.
Estos son algunos de los restaurantes más conocidos de la zona de la Acrópolis:
– Vitro
Makrigiani 27
– Daphne’s
Lysikratous 4
10558
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 3227 971
– Restaurante Furin Kazan
Appollonos 2
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 3229 170
Fax: +30 210 3227 829
– Restaurante Scholarhio
Trípodes 14
10558
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 3247 605
– Spondi
Pyrronos 5
11638 Pagrati
Atenas, Grecia
Tel : +30 2107 564 021
Fax : +30 2107 567 021
– Aigli Restaurante
Leoforos Vasilissis Olgas
10557
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 3369 363
– Mpakaliarakia
Kidathineon 41 Plaka
Atenas, Grecia
+30 210 3225 084
– Hermion
Pandrosou 15 Plaka
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 3247 148
– Eden
Lysiou 12
10556
Atenas, grecia
Tel: +30 210 3248 858
– Thanasis
Metropolis 69
10555
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 3244 705
Dónde dormir
La Acrópolis de Atenas recibe al año miles de visitantes que no se quieren perder este vestigio de la Grecia antigua. Por este motivo, la zona que rodea la Acrópolis dispone de numerosos hoteles de todas las clases, desde los más exclusivos, pasando por albergues y hoteles más económicos.
A continuación mostramos una lista con los hoteles y hostales cerca de la Acrópolis de Atenas:
– Acropolis Museum Boutique Hotel
Avenida Sygrou 48
Atenas, Grecia 117 42
Tel: +30 210 9249050
Fax: +30 210 9249052
– Hotel Magna Grecia
Mitropoleos 54
Atenas 10563
Grecia
Tel: +30 2103240314
Fax: +30 2103240317
– Acropolis View Hotel
Webster & Robertou Galli 10
117 42
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 9217 303-5
Fax: +30 210 9230 705
– Divani Larissa
Partenón 19
11742
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 9280 100
– Hotel Acropolis House
Kodrou 6
10558
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 3226 241
Fax: +30 210 3244 143
– Airotel Parthenon
Makri 6
Koukaki 11742
Atenas
Tel: +30 210 9234 594
– Athens Gate Hotel
Avenida Syngrou 10
11742
Atenas, Grecia
Tel.: +30-210 9238 302-3
Fax: +30- 210 9237493
– Athens House
Aristotelous 6
10432
Atenas, Grecia
Tel: +30 211 1199 146
– Attalos
Athinas 27
10551
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 3212 801
Fax: +30 210 3243 124
– Herodion Hotel
Rovertou Galli 4
11742
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 9236 832
– Athens Backpackers
Makri 12, Makryanni
11742
Atenas, Grecia
Tel: +30 210 9224 044
– Hostel Zeus
Sofokleus 27
Atenas, Grecia
Tel:+30-210-3211551
Fax:+30-210-3211662